El futuro de la saga ‘Piratas del Caribe’ pasa por un momento clave, ya que la decisión de Disney de prescindir de Johnny Depp y de apostar por un reparto completamente renovado no gustó demasiado a los fans. Ahora el productor Jerry Bruckheimer ha aclarado que el actor estaría de vuelta si de él dependiera y ha hablado sobre el futuro de la ya mítica franquicia de cine de aventuras.

«Es un artista genial»

Bruckheimer ha aclarado que la saga tiene dos proyectos en marcha, el reboot recientemente anunciado y la película protagonizada por Margot Robbie que la propia actriz llegó a dar por muerta en su momento. Sin embargo, el productor apunta que «creo que Disney también quiere hacer de verdad la de Margot» y señala lo siguiente sobre el reboot:

Es un reboot, pero si dependiera de mí, él estaría en la película. Le adoro, es un buen amigo. Es un artista genial y tiene un look único. Él creó al Capitán Jack Sparrow. No estaba en el guion, fue él haciendo un poco de Pepe Le Pew y de Keith Richards. Esa fue su interpretación de Jack Sparrow.

Sin embargo, Disney ha decidido ir en otra dirección y el guion del reboot ha quedado finalmente en manos de Jeff Nathanson, quien ya participó en su momento en el libreto de ‘Piratas del Caribe: La venganza de Salazar’. Y parece que va bien encaminado si hacemos casa a las palabras de Bruckheimer:

Creo que lo ha conseguido. Tiene un tercer acto increíble. Sólo tenemos que pulir el primero y el segundo y entonces lo conseguiremos. Pero ha escrito un tercer acto genial, genial.

Por tanto, es una simple cuestión de tiempo que el reboot de ‘Piratas del Caribe’ esté listo para poder empezar a fichar a actores. Cero dudas de que va a dar igual a quién se fiche, porque va a provocar reacciones muy enfrentadas.

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Steven Spielberg no es especialmente amigo de hacer diferentes montajes de sus películas, pero hay una que tiene tres versiones diferentes y que en una de ellas incluye la escena que el Rey Midas más arrepiente de haber rodado en sus más de 50 años de carrera en Hollywood. El título en cuestión es una obra tan aclamada como ‘Encuentros en la tercera fase’.

Estrenada en 1977, Spielberg se vio en una encrucijada cuando en Columbia le exigieron tener la película lista para poder estrenarla en noviembre de ese año. El estudio estaba pasando por una delicada situación económica y no podían permitirse concederle seis meses para tenerla a gusto y lanzarla en verano del año siguiente.

Tres montajes diferentes

Eso llevó a que Spielberg no quedase muy satisfecho con el resultado final, pero aprovechó el enorme éxito comercial de ‘Encuentros en la tercera fase’ para pedir al estudio más dinero y lanzar un nuevo montaje que quedase completamente a su gusto. El problema es que el estudio le exigió rodar una escena que iba totalmente en contra de lo que él quería, pero no le quedó otra que rodarla, tal y como recordaba en el Cómo se hizo de la película lanzado en 1997:

Tras el éxito de la película, volví a Columbia un año y medio después y dije: ‘Ahora déjame terminar la película como siempre había pensado. Quiero recortar ciertas escenas y rodar más secuencias’. Y entonces me dijeron: ‘Te daremos el dinero… si muestras el interior de la nave nodriza. Danos algo con lo que podamos hacer una campaña’.

Así que llegué a un acuerdo e hice que Richard Dreyfuss entrara en la nave nodriza. Nunca debería haberlo hecho, porque el interior de la nave siempre debería haber sido un misterio.

Ese nuevo montaje se estrenó en 1980 y durante muchos años esa edición especial que estuvo disponible. Sin embargo, Spielberg no se olvidaba de la espinita que se la había quedado clavada con ‘Encuentros en la tercera fase’ y en 1998 al fin pudo dejar la película a su gusto estrenando el Montaje del Director.

Para diferenciarlas a simple vista, simplemente hay que tener en cuenta la duración. La primera versión se va a los 135 minutos, mientras que la edición especial de 1980 bajó hasta los 132 minutos y el Montaje del Director es la más larga con un metraje de 137 minutos.

Los principales cambios del Montaje del Director es que se elimina esa escena en el interior de la nave nodriza pero incluía varios momentos de la Edición Especial no presentes en la versión original en cines, algunos de los cuales habían sido eliminados o recortados para la versión estrenada en 1980. Al final era un poco mezcla de todo lo que le gustaba más a Spielberg.

21 años tuvieron que pasar para que Spielberg pudiera hacer las paces con ‘Encuentros en la tercera fase’ y quedar satisfecho con esta aclamada película de ciencia ficción. Eso sí, Columbia ha seguido dando la opción de acceder a los tres diferentes montajes, pues todas las versiones se incluyeron en la edición en UHD de la película que podéis comprar por 25,99 euros.

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Tras un caluroso final de mitad de temporada, a los fans de ‘Los Bridgerton’ no les queda ahora esperar mucho hasta recibir el resto de episodios de la tercera el 13 de junio. Pero la espera probablemente sea agónica, ya que tras muchos episodios de cortejo, las dinámicas entre Penélope y Colin han alcanzado nuevas cotas.

Esto da comienzo a una etapa muy esperada para los lectores y conocida como ‘Polin’, una de las parejas más queridas de las novelas. Los espectadores también la han anticipado durante mucho tiempo, ya que la gran química entre los actores ha sido palpable hasta ahora. La propia intérprete de Penélope, Nicola Coughlan, ya avisó de lo fogosas que podrían llegar a ser las nuevas escenas, y que ella misma pidió aparecer desnuda, a modo de réplica frente al bodyshaming que ha recibido en todo este tiempo.

Aumentando la tensión

Lo cierto es que la ya famosa «escena del carruaje» contiene un cambio significativo con respecto a los libros que, seguramente, hará que el futuro inmediato de la serie esté tan lleno de pasión como de drama. Aunque gran parte de la escena se mantenga intacta, el contexto cambia bastante. En los libros, la escena ocurre después de que Colin descubra que Penelope es, efectivamente, la polémica y misteriosa columnista Lady Whistledown. Tras superar el disgusto, este momento íntimo sirve de reconciliación.

En la serie, sin embargo, este secreto de Penelope sigue manteniéndose… bueno, secreto. Lady Whistledown era su alter ego para desatar su lado más rebelde, pero conforme las tensiones siguen creciendo con Colin, esta parte de sí misma entra cada vez más en conflicto con su posible relación con el aristócrata.

Que esto se destape es sin duda cuestión de tiempo. Una de las grandes claves de esta tercera temporada es el triángulo amoroso entre Colin, Penelope y Lord Debling, y de cara a mantener a la audiencia en tensión, los guionistas necesitaban reordenar los sucesos de la serie para que la amenaza del conflicto entre Penelope y Colin siga presente hasta el final. No siempre los cambios con respecto a los libros son malos, pero a veces sí que se pueden sentir un poco crueles.

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