El Barroco fue una
época en la que cobraron extremada importancia los sentidos: vista, oído,
gusto, olfato y tacto fueron seducidos y hasta engañados por los artistas. En
la pintura, la técnica alcanzó una precisión casi fotográfica y permitió
generar ilusiones ópticas.
En la música, apareció una
trampa para los sentidos: los ostinati o bajos obstinados, una
forma de jugar con el paso del tiempo.
Esas secuencias melódicas, rítmicas o armónicas se repetían constantemente y,
sobre ellas, aparecían melodías frescas. ¿El resultado? Una música que sonaba
nueva, pero parecía conocida.
Así es como se podrá escuchar
en el próximo programa de Syntagma Musicum Usach, Folías, chaconas y
otros ostinatos, que se presentará este miércoles 20 de noviembre (19:30
horas) en el Teatro Aula Magna Usach, con entradas gratuitas ya disponibles en Portaltickets. Además, el concierto
será transmitido en vivo por Radio Usach, a través de sus señales FM
(94.5) y de televisión digital (50.2), su sitio web y su canal de Youtube.
“Este programa está enfocado
en una técnica de composición. Eso es novedoso, porque habitualmente los
conciertos están basados en un compositor, un país o una agrupación específica,
pero ahora hemos querido hacer este programa sobre una técnica muy recurrente
en el Barroco, que sirvió mucho para que los compositores desarrollaran su
creación”, explica Jaime Carter, director del elenco.
“Sobre el bajo obstinado se construía toda una
obra y eso empujaba al compositor a un terreno complejo, porque la repetición
siempre lleva al aburrimiento. Sobre esa música repetitiva, el desafío era
escribir algo variado y mantener la atracción del auditor”.
La mayoría de los ostinatos
tenían nombres que les identificaban, relacionados con la composición en la que
aparecieron, su lugar de origen o por ser una danza conocida. La Bergamasca,
por ejemplo, estaba asociada a la ciudad de Bérgamo, en Italia, mientras que
otras tres se vinculan con el baile: la folía, la chacona y la passacaglia o
pasacalle.
Con la violinista Natalia Cantillano como
invitada, Syntagma Musicum Usach mostrará diversos
ejemplos, a través de autores que fueron contemporáneos pero trabajaron en
distintos puntos de Europa.
Entre ellos, se encuentran el
británico Henry Purcell (1659-1695), el español Santiago de
Murcia (1673-1739), los italianos Francesco Cavalli (1602-1676)
y Girolamo Frescobaldi (1583-1643), el germano-italiano Giovanni
Girolamo Kapsberger (c. 1580-1651) y el francés Robert de Visée (1659-1733).
“Al comienzo, la mayoría se
van a presentar con el bajo sobre el cual se construye la obra. Eso nos
permitirá guiar a las personas y que reconozcan este elemento. Vamos a tratar
de explicarlo de una manera didáctica, donde se pueda entender y reconocer el
bajo que vamos a ocupar, para que puedan disfrutar más del concierto”,
adelanta Jaime Carter.
Jaime carter. (c) Manuel Urra. |
“Es importante recalcar que este es un
principio de composición, no es algo que esté relegado en el pasado. O sea, se
ocupa hasta el día de hoy, muchas veces en la música popular.
Uno podría citar
canciones populares que tienen este principio de un bajo repetitivo. Al ser una
técnica de composición, nunca ha caído en el abandono”, agrega el músico.
Luego de este concierto, Syntagma Musicum Usach vivirá uno
de los principales hitos de su temporada 2024: junto al Coro Madrigalista
Usach, interpretarán una versión histórica de El Mesías, la conocida
partitura de Georg Friedrich Haendel (1686-1759). La obra se podrá
escuchar en dos funciones, el miércoles 4 y jueves 5 de
diciembre, en el Teatro Aula Magna y el Auditorio FAE,
respectivamente.