Es conocido en la historia del arte moderno latinoamericano por su serie de los tajos y por el desarrollo de la serie de las Quantas, pero además, el pintor, escultor y ceramista ítalo-argentino Lucio Fontana, también fue uno de los precursores del Manifiesto Blanco y del primer Manifiesto de Espacialismo, desarrollados en Argentina y Europa, respectivamente.
Además del desarrollo de piezas tridimensionales, las obras por las que este artista, que vivió toda su vida entre su Argentina natal y las tierras europeas, es reconocido y recordado dentro de la historia del arte del siglo XX, son Los Tajos, obras pictóricas que él intervenía haciendo cortes en el lienzo, disponiendo cada sección de tal manera que integraran una composición.
Fundador de la academia de Altamira en la nación sudamericana en la que nació, en Argentina propone el Manifiesto Blanco, reflexión en la que comienza a considerar el papel que la materia, el color y el movimiento juegan en la filosofía estética de la década de los cuarenta, abriendo el debate para tendencias como el cinetismo o arte óptico.
Lucio Fontana hizo múltiples exposiciones a lo largo de su vida, llevando sus creaciones a galerías y museos de París, Londres y Nueva York, por mencionar sólo algunas ciudades, además de participar con reconocimiento en la Bienal de Sao Paulo.