No se puede negar que hay empresas que han devastado áreas de bosques para crear centros industriales y urbanísticos ocasionando daños irreparables al suelo y a todo el ambiente, lo que agravando aún más el cambio climático. Sin embargo, las compañías han comprendido la magnitud de esta acción y como parte de la Responsabilidad Social Empresarial han puesto en marcha la reforestación como una manera de ayudar a minimizar el impacto negativo que se le hace al ambiente sobre todo a la explotación de árboles.
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¿Qué es la reforestación?
La reforestación es un proceso que consiste en repoblar aquellas zonas que fueron intervenidas por el hombre y que por esta acción se han perdido grandes cantidades de árboles los cuales son de gran importancia para la vida. Es una actividad que busca contribuir de igual manera a instaurar la masa forestal en áreas donde se han producido incendios ya sea por causa natural o por intermedio del ser humano y talas clandestinas para obtener materia prima como la madera indispensable en distintas actividades comerciales.
Importancia de la reforestación
La reforestación es indispensable para la supervivencia tanto del hombre como de otros seres vivos debido a que los árboles utilizan el dióxido de carbono y lo convierten en oxígeno a través del proceso fotosintético, el cual es necesario para la vida. De igual manera, ayuda a minimizar el efecto invernadero el cual se intensifica con la presencia del CO2 y trae como consecuencia que el calor de la Tierra sea retenido en la atmósfera y no pueda liberarse lo que aumenta el calentamiento global.
La reforestación como Responsabilidad Social Empresarial
Todas las empresas deben ejecutar planes de reforestaciones ya que tiene muchos beneficios para el ambiente y por ende para el hombre. La Fundación Yammine explica algunos de ellos:
Ayudan a reforzar las barreras naturales
Los árboles tienen la función de servir como una barrera natural para frenar el impacto de tormentas y ciclones debido a que el viento pierde fuerza cuando choca con las copas, asimismo tiene el mismo papel con la lluvia y las olas marinas. Otro beneficio de los bosques es que impide o minimiza las inundaciones, pues, filtra el agua hacia subsuelo lo que evita una posible inundación.
Contribuyen a la regularización del clima
Puesto que los árboles proporcionan una gran capacidad de sombra, lo que permite disipar las altas temperaturas manteniendo el ambiente más húmedo. Esto es de vital importancia en las zonas urbanas que debido a la gran cantidad de concreto y las numerosas edificaciones existentes hacen que el calor sea muy sofocante.
Ofrece disponibilidad de agua
Los árboles son recursos naturales muy importante para la naturaleza porque contribuyen a canalizar el agua proveniente de las lluvias, pues, al deslizarse por las copas, hojas y tronco, este vital liquido llega al suelo que, además de hidratarlo, se acumula en el subsuelo y llegar a reservorios para ser utilizado por el hombre, plantas y animales.
Conserva la biodiversidad
Cuando se vuelve a plantar árboles y vegetación, se está contribuyendo a regenerar y a revivir muchos ecosistemas que son los hogares de una gran cantidad de animales, e igualmente atrae a polinizadores que ayudan a diseminar semillas y así aumentar la flora, lo que es muy beneficioso.
Previene la erosión del suelo
Al reforestar los bosques que han sido degradados o cualquier otra zona, los suelos resultan muy beneficiados ya que se evita la degradación porque esta vegetación disminuye el efecto del agua cuando llueve o hay deslave.
Cuando se talan árboles se está contribuyendo a aumentar el cambio climático ya que el CO2 almacenado en ellos se libera al ambiente generando que el planeta se caliente aumentando el calentamiento global, es por eso que hay que fomentar la reforestación.