Apenas duró seis años, pero ‘Jujutsu Kaisen‘ se ha convertido rápidamente en uno de los mangas shonen de acción más aclamados de los últimos años. En parte ha sido gracias al anime de MAPPA, pero Gege Akutami también ha conseguido mantener la tensión y el misterio durante semanas y semanas con un reparto de personajes con los que es facilísimo encariñarse.
Con su capítulo 271, ‘Jujutsu Kaisen’ ha llegado a su final. Y para muchos fans ha sido un final más bien flojo y repentino, especialmente por todos los cabos que se quedan abiertos y la cantidad de cosas que se quedan en el aire en este final. Aunque sí que ha habido ciertos cierres importantes y podemos imaginarnos cómo va a ser el futuro inmediato de nuestros protagonistas.
¡Aviso! Este artículo contiene spoilers del manga de ‘Jujutsu Kaisen’, especialmente del capítulo 271
Contenido
La derrota de Sukuna
El último gran arco de ‘Jujutsu Kaisen’ se centró en la batalla contra Ryomen Sukuna, que había poseído el cuerpo de Megumi Fushiguro. Prácticamente todos los personajes que hemos conocido en el manga se unieron para intentar liberar a Fushiguro y derrotar a Sukuna, y el climax de la batalla llegó cuando Yuji Itadori activó su Expansión de Dominio.
Yuji transportó a Sukuna a un escenario inspirado en su propio pueblo natal donde tuvo el combate definitivo. Mientras tanto, Nobara Kugisaki (que se acababa de despertar de un coma) usó su Resonancia en el último dedo de Sukuna para atacar directamente su alma y perturbar su Dominio, dándole a Yuji el apoyo definitivo para derrotarle.
Sukuna fue expulsado del cuerpo de Fushiguro y murió al rechazar la ayuda de Yuji. Este no es el último momento en el que le vemos, porque en el capítulo 271 se reúne en el Más Allá con Mahito. Tras su conversación, Sukuna decide tomar el camino del norte y reencarnarse, declarando que tratará de ser diferente en su nueva vida.
El trío calavera
Megumi Fushiguro recupera su cuerpo, Nobara Kugisaki está viva, y el trío queda completo con Yuji Itadori. Parece que los tres protagonistas han quedado «casi» sin secuelas aparte de sus cicatrices y heridas y tratan de recuperar su rutina trabajando como hechiceros.
Megumi por fin descubrió que Gojo mató a su padre al recibir una carta de su antiguo maestro, y Nobara también tiene información sobre su madre si quisiera buscarla en el futuro. El último capítulo ya nos plantea a los tres trabajando juntos de nuevo en más misiones para ayudar a la gente de a pie y librarlos de maldiciones, dejando claro que este es su futuro inmediato.
Yuji, por su parte, se ha convertido en el gran heredero de Satoru Gojo, y no porque haya heredado ninguna de sus técnicas sino porque ‘Jujutsu Kaisen’ apunta a darle un rol similar como mentor de otros hechiceros sacándole el máximo partido a su actitud positiva.
Todo el equipo
Yuta Okkotsu pudo recuperar su cuerpo sin problemas gracias a que Rikka se encargó de protegerlo, aunque se llevó un tirón de orejas por parte de Maki.
Durante el capítulo 270 de ‘Jujutsu Kaisen’, Akutami se encargó de ir cerrando algunos hilos, como la situación de la barrera de Tengen, o la implicación de que Charles y Higuruma han retomado sus trabajos. Aunque uno de los momentos más confusos es que Kenjaku podría seguir vivo y ahora forma parte de un dúo cómico con Takaba, pero no esperemos explicaciones ni confirmaciones por parte de Akutami.
El futuro de otros personajes como Hana, Kinji Hakari, Kirara Hoshi, o incluso Maki, Panda, Yuta y Toge… Pues se quedan un tanto en el aire. Podemos asumir que también han vuelto a sus vidas de antes de la batalla contra Sukuna.
Y si aún se albergaba alguna esperanza de que regresase milagrosamente… Akutami también deja claro que Satoru Gojo está muerto (y muy muerto). Gojo se ha despedido de sus estudiantes con sus últimas cartas, pero como demuestra Yuji su presencia no les ha dejado del todo y ayudará a reconstruir la sociedad de hechiceros.
¿Un presagio para el futuro?
La última escena de ‘Jujutsu Kaisen’ nos deja con un cierto recuerdo del inicio del manga. El último dedo de Sukuna vuelve al lugar donde lo encontramos por primera vez: el antiguo instituto de Yuji. Ya no alberga el alma de Sukuna y por lo tanto no está sellado, pero se encuentra en la escuela en un pequeño altar para alejar del lugar a maldiciones de menor rango.
Estos últimos capítulos han dejado muchos cabos sueltos y para buena parte de los lectores se ha sentido atropellada, casi como si Akutami quisiera ya cerrar ‘Jujutsu Kaisen’ después de meses muy quemado y se ha dejado mucha historia por el camino.
También es cierto que Akutami nunca ha sido muy de grandes explicaciones y tendríamos que estar ya acostumbrados, porque el mangaka es de los que apuestan más por crear sentimientos y escenas impactantes antes de dar todo masticado. Por ahora ‘Jujutsu Kaisen’ no tendrá secuela, así que hasta aquí hemos llegado… Aunque todavía no nos despedimos del todo, porque tenemos varias temporadas de anime por delante para terminar de adaptar toda la épica de hechiceros.
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